NAVEGAR ENTRE PALABRAS

domingo, 25 de diciembre de 2016

ENTRE AMAPOLAS








Me encerré en mi lecho
sombrío y frío
entre amapolas.

Velé tu sombra entre los cuerpos
desnudos, muertos,
de la flor arranqué la savia,
la vida y el sustento.

Abrí la ventana
todo estaba en silencio
busqué a las gentes, corrían...

Sin luz, sin tiempo
nada me salía
¡estaba todo tan hecho!...

martes, 20 de diciembre de 2016

BARRERAS









Rompí barreras que ataban mi cuerpo
y eran los recuerdos los que
me ataban al sufrimiento.
levanté mi vista al viento,
donde gravados estaban mis pensamientos.
No escuchar la voz del alma
es el pecado del mal entendimiento,
llené con vída la flor muerta
y brotaron de sus ramas
las más bellas hojas de primavera,
y el camino se hace corto
para tantas hermosas ideas.
Permanecí con mis manos quietas
y mi espíritu avergonzado me espera.
Ya me acerco hacia él, entera
como la más hermosa noche de luces
y la gloria de mi ser rejuvenece
porque el tiempo todavía espera.




domingo, 18 de diciembre de 2016

COLORES




Sueños, naces, mueres,
espacio en el tiempo
de perdidas ilusiones.
Flores que nacen
de múltiples colores
perdiéndose en el tiempo.
Existimos buscando
un arcoiris de vida
a la ilusión perdida,
entre notas y acordes.

sábado, 10 de diciembre de 2016

AUREOLA DE ESPUMA




Al abrir los ojos
 te vi a ti
como una aureola de espuma,
que quisiera rodear mi cuerpo.
Blanda sensación del que quiere y siente,
suave aguijoneo del amor
que te eleva los sentidos.
¡Es tanto lo que siento!,
que al abrir los ojos
te vi a ti
como dueño de mi tiempo
amante de mis sueños.
¡Es tanto el sufrimiento!
todo solo por quererte,
¡es tan poco lo que ofrezco!.
Tu esclavo de mi amor
me obsequiaste con tus besos
el fuego de tu amor.

sábado, 3 de diciembre de 2016

SUEÑOS DEL VIENTO



En estos momentos
de la mente olvidada,
en la austeridad de
historias perdidas,
dentro del sueño
intencionando, en ese sopor
de la intención
tantas veces no logrado.

Esperan las marsopas
durmientes, bostezando
un tiempo, en ese
préterito desechado
por falta de uso.
Esperando el futuro
renaciente, deseando
siempre el frescor
por todo lo iniciado,
luchando por el
principio continuo y cambiante.

Arqueólogos de la conciencia
hirientes, nerviosos
por mil chispas dentro
de la propia inteligencia,
peregrinos del futuro
ANHELANTES.
Mirones expectantes
pasivos sin causa
por la lucha,
siempre durmiendo
entre el polvo
de sus abigarrados
entornos...
masificados y solos.