Hermosa estabas en tu jardín
como una Diosa protegía
en tu cándida y SERENA belleza.
Inspirabas SABIDURÍA
y el VIENTO así lo decía.
Tanto miraban
que nada entendías
alegría, asombro
admiración picardía...
Por SUEÑOS de un lejano AMOR
tan hermosa te sentías por tanto AMOR,
¡más ay dolor!
la rosa ROJA por desamor
en NEGRA se trocó.
Sin fuerzas ni ESPÍNAS
para defender su HONOR
la ROSA fruto del AMOR
sin SUEÑOS se quedó.